Para la masa:
- 500 g de harina de trigo (aproximadamente 4 tazas)
- 100 g de mantequilla derretida (½ taza)
- 1 huevo grande
- 1 cucharadita de sal
- ½ taza de agua fría (aproximadamente)
- 1 cucharadita de vinagre blanco (opcional, pero recomendado para una masa más crocante)
- 1 cucharadita de polvo de hornear (para una textura más ligera)
Para el relleno:
- 500 g de carne molida de res (puedes mezclar con carne de cerdo para un resultado más jugoso)
- 1 cebolla grande, finamente picada
- 2 dientes de ajo, machacados
- 1 pimiento rojo o verde, en cubitos (opcional, pero aporta color y sabor)
- ½ taza de aceitunas verdes o negras, picadas (opcional)
- 2 huevos cocidos, picados en cubos
- 1 cucharadita de pimentón (dulce o picante, según tu gusto)
- ½ cucharadita de comino molido
- Sal y pimienta al gusto
- Un chorrito de aceite de oliva
- ¼ taza de pasas (opcional, para un toque agridulce)
Para freír:
- Aceite vegetal en cantidad suficiente
Instrucciones Paso a Paso
1. Elaboración de la Masa:
- En un recipiente grande, mezcla la harina de trigo tamizada, la sal y el polvo de hornear.
- Haz un hueco en el centro e incorpora la mantequilla derretida y el huevo. Comienza a mezclar con una cuchara o con las manos, integrando los ingredientes.
- Agrega el agua fría poco a poco, y si lo usas, el vinagre blanco. Continúa amasando hasta que la masa comience a unirse. La cantidad de agua puede variar ligeramente.
- Vuelca la masa sobre una superficie limpia y ligeramente enharinada. Amasa durante unos 8 a 10 minutos hasta obtener una textura lisa, elástica y que no se pegue a los dedos.
- Forma una bola con la masa, cúbrela con un paño de cocina limpio o con film transparente y déjala reposar a temperatura ambiente durante al menos 30 minutos. Este reposo es crucial para que la masa se relaje y sea más fácil de estirar.
2. Preparación del Relleno:
- Mientras la masa reposa, prepara el relleno. Calienta un chorrito de aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio.
- Sofríe la cebolla picada y el ajo machacado hasta que estén transparentes y fragantes, unos 5-7 minutos.
- Si usas pimiento, añádelo a la sartén y cocina por un par de minutos más hasta que se ablande ligeramente.
- Incorpora la carne molida. Cocínala bien, deshaciéndola con una cuchara de madera para que quede suelta y no se formen grumos grandes. Cocina hasta que la carne haya perdido su color rosado.
- Sazona la carne con el pimentón, el comino molido, sal y pimienta al gusto. Mezcla bien para que todos los sabores se integren.
- Si decides usarlas, agrega las pasas y las aceitunas picadas. Cocina todo junto durante unos 5 minutos más, permitiendo que los sabores se mezclen.
- Retira la sartén del fuego. Incorpora los huevos duros picados y mezcla suavemente. Prueba el relleno y ajusta la sazón si es necesario. Deja que el relleno se enfríe por completo antes de armar las empanadas; esto es muy importante para evitar que la masa se humedezca o se rompa.
3. Armado de las Empanadas:
- Una vez que la masa haya reposado y el relleno esté frío, divide la masa en porciones pequeñas, del tamaño de una nuez grande, y forma bolitas.
- Sobre una superficie ligeramente enharinada, estira cada bolita con un rodillo hasta formar discos delgados de unos 10-12 cm de diámetro.
- Coloca una o dos cucharadas generosas del relleno frío en el centro de cada disco de masa. No las rellenes en exceso para poder sellarlas bien.
- Humedece ligeramente el borde de la masa con un poco de agua. Dobla cada disco por la mitad, formando una media luna, y presiona los bordes firmemente para sellar. Para un sellado más seguro y un acabado tradicional (repulgue), puedes hacer pequeños dobleces a lo largo del borde o presionar con los dientes de un tenedor.
4. Hora de Freír:
- En una sartén profunda o un caldero, calienta abundante aceite vegetal a fuego medio-alto. El aceite debe estar lo suficientemente caliente para que las empanadas se doren rápidamente sin absorber demasiada grasa (aproximadamente 180°C o 350°F). Puedes probar la temperatura echando un trocito pequeño de masa; si burbujea y sube a la superficie dorándose, está listo.
- Fríe las empanadas de pocas en pocas, evitando saturar la sartén para que la temperatura del aceite no baje demasiado.
- Fríelas por ambos lados hasta que estén bien doradas y crujientes, lo que tomará unos 3 a 4 minutos por cada lado.
- Con una espumadera, retira las empanadas fritas del aceite y colócalas sobre un plato cubierto con papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
Sugerencias para Servir y Acompañar
Las empanadas fritas de carne se disfrutan mejor recién hechas, cuando aún están calientes y crujientes. Son un plato versátil que puede servirse como entrada, plato principal, o como parte de una picada en reuniones familiares o con amigos.
Acompáñalas con salsas tradicionales como una salsa criolla fresca (cebolla, tomate, ají y vinagre), un chimichurri casero vibrante, o incluso una mayonesa con ajo o alguna salsa picante de tu preferencia. Un buen vino tinto o una cerveza fría también son excelentes compañeros.
Variaciones de las Empanadas Fritas de Carne
Aunque esta receta se centra en un relleno clásico de carne, las empanadas son un lienzo para la creatividad. Si prefieres no freírlas, puedes hornearlas a 180°C (350°F) durante unos 20-25 minutos, o hasta que estén doradas; pincélalas con huevo batido antes de hornear para un mejor color. Para el relleno, puedes experimentar añadiendo papa cocida en cubitos, zanahoria rallada o incluso un poco de queso que se derrita.
Otras variaciones populares incluyen rellenos de pollo deshebrado, jamón y queso, o opciones vegetarianas con espinacas y ricota, o un salteado de champiñones y cebolla. Para una masa con una textura extra ligera, algunos cocineros mezclan un poco de maicena con la harina.
Beneficios para la Salud (con moderación)
Si bien las empanadas fritas son consideradas una indulgencia y deben consumirse con moderación, prepararlas en casa ofrece ciertas ventajas. Tienes control total sobre la calidad de los ingredientes, desde la carne y las verduras del relleno hasta el tipo de aceite utilizado para freír. La carne es una buena fuente de proteínas, y si el relleno incluye vegetales, estos aportan vitaminas y fibra.
Una empanada puede ser un bocado satisfactorio que, disfrutado ocasionalmente, forma parte de una dieta equilibrada y del placer de comer.
Preguntas Frecuentes (FAQs)
¿Cómo evito que mis empanadas se abran al freírlas?
Asegúrate de no rellenarlas en exceso, de que el relleno esté completamente frío antes de armarlas, y de sellar muy bien los bordes. Humedecer ligeramente los bordes con agua antes de sellar ayuda. También, evita que el aceite esté demasiado caliente o demasiado frío.
¿Puedo preparar la masa o el relleno con antelación?
Sí. La masa se puede guardar bien envuelta en el refrigerador hasta por 2 días. El relleno también se puede preparar con anticipación y conservar refrigerado. Es mejor armar y freír las empanadas justo antes de servir.
¿Cuál es la temperatura ideal del aceite para freír empanadas?
La temperatura ideal es alrededor de 180°C (350°F). Si no tienes termómetro, el aceite está listo cuando un pequeño trozo de masa echado en él burbujea activamente y se dora en aproximadamente un minuto sin quemarse.
Mis empanadas quedaron muy duras, ¿qué pudo haber salido mal con la masa?
Una masa dura puede ser resultado de haberla trabajado en exceso después de añadir el líquido, usar poca grasa, o no haberla dejado reposar lo suficiente para que el gluten se relaje. Asegúrate de seguir los tiempos de reposo.
¿Se pueden congelar las empanadas?
Sí, las empanadas se pueden congelar. Lo ideal es congelarlas crudas, una vez armadas. Colócalas separadas en una bandeja hasta que estén firmes, y luego transfiérelas a una bolsa de congelación. Se pueden freír directamente desde el congelador, aunque puede que necesiten un par de minutos más de cocción, o dejarlas descongelar un poco antes.
Conclusión
Preparar empanadas fritas de carne en casa es una experiencia culinaria gratificante que une tradición y sabor. Aunque pueda parecer laborioso, el resultado de una masa crujiente y un relleno jugoso hecho con tus propias manos no tiene comparación. Son perfectas para compartir, celebrar o simplemente para darte un gusto con un clásico que nunca falla.
Esperamos que esta receta te inspire a poner manos a la obra y a disfrutar del delicioso arte de hacer empanadas.